Hace un día estupendo para conducir trenes...

Suena de nuevo el característico cascabeleo de la suspensión de las francesas. Quedan pocas circulando por CGL, pero las supervivientes "se comen" las tolvas de cereales como si nada.

Relegadas a pequeños servicios lanzadera, sobre todo entre Gadea y la Clasificación, y Gadea y los diferentes apartaderos y terminales, nos pondremos a los mandos de la nuestra en el depósito de locomotoras y avanzaremos aislados hasta Gadea para acoplarnos al 868, un tren de tolvas con destino Cereales Paco.

A tipo 100, "cascabeleando" y dando "bandazos" en los cambios, sufrimos la incómoda cabina de conducción de la 276, la francesa de toda la vida.